Numerosas personas participaron del tedeum solemne celebrado el 31 de agosto en la catedral local con motivo del 231º aniversario de la fundación de la ciudad de Orán y la fiesta patronal de San Ramón Nonato.
La celebración fue presidida por el obispo de Orán, monseñor Luis Scozzina OFM, y concelebrada por el obispo auxiliar, monseñor Claudio Castricone y sacerdotes de la diócesis.
Estuvieron presentes autoridades provinciales y municipales, legisladores, representantes de las fuerzas de seguridad, instituciones educativas y vecinos de la ciudad.
En su homilía, monseñor Scozzina puso el foco en los desafíos actuales de la sociedad, a la luz del Año Jubilar de la Esperanza convocado por el papa Francisco.
Democracia y participación
Monseñor Scozzina advirtió que "nuestra democracia, en crisis de representatividad y en formas de negación de una auténtica participación ciudadana, imposibilita la integración de todos".
En este sentido, señaló que los excluidos de las periferias urbanas y de las comunidades originarias son un llamado urgente a que dirigentes y ciudadanos: "crezcan en la inclusión ciudadana y en la participación, que se inicia con el reconocimiento de los derechos fundamentales de una vida digna para todos".
Profecía social y cuidado de la creación
El prelado afirmó que la profecía social que surge en este Año Jubilar debe manifestarse en una cultura del encuentro y en nuevas formas relacionales, capaces de sanar los tejidos sociales, ambientales y eclesiales.
"La Iglesia profética -expresó- es todo el Pueblo fiel que sana heridas, restaura el equilibrio con la naturaleza y construye una sociedad basada en la equidad y en vínculos de reciprocidad".
Apoyándose en la encíclica Laudato si', recordó que cada pueblo debe ser protagonista de su propio desarrollo y que no se pueden aplicar soluciones uniformes a problemas locales sin la participación activa de las comunidades.
Papel del Estado y la construcción del bien común
Monseñor Scozzina también destacó el principio de la función del Estado señalado por el papa Francisco en Evangelii gaudium: "le compete el cuidado y la promoción del bien común de la sociedad". Y subrayó la importancia de un diálogo político con consensos, basado en la subsidiariedad y la solidaridad.
En este marco, valoró la reciente convocatoria al encuentro sobre el Corredor Bioceánico del Capricornio, señalando que "afecta a todos" y requiere la participación de la ciudadanía.
Iglesia samaritana y opción por los frágiles
El obispo invitó a renovar la esperanza de una Iglesia "misericordiosa y samaritana", atenta a los jóvenes en situación de vulnerabilidad.
Agradeció particularmente la resignificación del Hogar del Padre Diego, ahora incorporado a la red de los Hogares de Cristo, que acoge la vida "como viene".
Por último, monseñor Scozzina llamó a cuidar la vida en todas sus expresiones, especialmente la más débil, inspirado en San Ramón Nonato, patrono de Orán, "el que cuida la vida"; y concluyó confiando la ciudad y la diócesis a la protección de la Virgen del Carmen, para que acompañe el camino común de escucha, acogida y servicio.