"Con profundo dolor, recibimos la noticia del fallecimiento de Bastián Nehemías Escalante Montoya, de apenas 10 años, que, en la noche de ayer, había recibido un disparo mientras regresaba a su casa, acompañado por su mamá, en el barrio de la Carne (Wilde)", expresó el obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Marcelo Margni, en referencia al niño fallecido luego de quedar en medio de un tiroteo entre un policía y cuatro delincuentes que quisieron robarle la moto.

En un mensaje difundido este jueves, el prelado extendió a los padres de Bastián y a sus seres queridos su cercanía y la de toda la comunidad diocesana: "Nos faltan y están de más las palabras en un momento de tanto dolor, pero quisiéramos estar junto a ustedes, acompañándolos con nuestra solidaridad y nuestra oración".

"Como comunidades cristianas, creyentes en Cristo, Señor de la vida, al repudio de la violencia y el reclamo de justicia, volvemos a unir el pedido de acciones prontas y efectivas, y nuestro compromiso por una sociedad que cuide y defienda la vida de niños, niñas, adolescentes y jóvenes", planteó.

A su vez, pidió a todas las comunidades "que tengan presente a Bastián y a sus seres queridos en la Eucaristía de estos días y del próximo domingo".