El arzobispo de Córdoba, cardenal electo Ángel Sixto Rossi SJ, mantuvo un encuentro con los periodistas en la Oficina de Prensa de la Santa Sede, en forma previa al consistorio que presidirá el próximo sábado el Papa Francisco, durante el que recibirá el birrete y el diploma cardenalicios junto a una veintena de purpurados de todo el mundo.

El futuro purpurado expresó su expectativa de seguir colaborando con el pontífice en el gobierno de la Iglesia y reconoció que vivió con "asombro y cierto pánico" su creación cardenalicia.

Tras aclarar que vive esa promoción como un nuevo servicio y no como "ejercicio del poder", reveló que siente la ilusión de vivir esa misión con actitudes de escucha, diálogo y discernimiento.

El arzobispo recibirá el birrete y el título cardenalicios junto a otros dos compatriotas: monseñor Víctor Manuel Fernández, actual prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, y el padre Luis Pascual Dri, confesor en el santuario de Nuestra Señora de Pompeya de Buenos Aires.

"Fernández es un hombre de gran capacidad espiritual e intelectual; una figura que hará mucho bien", aseguró monseñor Rossi.

En cuando al confesor de Jorge Bergoglio, consideró que será creado cardenal como “figura emblemática”. "El sacramento de la Reconciliación lo ha apasionado a lo largo de toda su historia de servicio a la Iglesia", confió en diálogo con Vatican News.

A días del inicio de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo, de la que también participará, monseñor Rossi insistió en que experimenta este momento con la conciencia de prestar un nuevo servicio.

El arzobispo cordobés aclaró que esta disposición a servir se manifiesta más en las obras que en las palabras. Por ende, el desafío es lograr la coherencia entre lo que se dice y lo que se hace, lo cual “no es fácil”, reconoce.

Al ser consultado sobre cómo se vivió en la Argentina el camino sinodal hasta la asamblea de octubre, respondió: "Se ha preparado con mucha consulta, con mucha oración, con buen espíritu”.

Mons. Rossi desea que sea "una experiencia de Iglesia fuerte y fecunda", y concluyó enviando su bendición a los oyentes de Radio Vaticana.