Referentes de los credos de Córdoba participaron de la Oración Interreligiosa por la Patria que se llevó a cabo el 13 de julio en la iglesia Teresa de Jesús, donde agradecieron la diversidad y coexistencia de las confesiones religiosas presentes en el país y se comprometieron a seguir trabajando por la paz, por la concordia, el cuidado de la creación y el bien común de los argentinos.

El tradicional momento de oración compartido, en el marco de las celebraciones por el 9 de Julio, fue convocado por la arquidiócesis de Córdoba y la Comisión Arquidiocesana de Ecumenismo y Diálogo Interreligioso. También adhirieron el Comité Interreligioso por la Paz (Comipaz) y el Centro Ecuménico de Córdoba.

Participaron de la oración el arzobispo de Córdoba, cardenal electo Ángel Rossi SJ; el rabino Marcelo Polakoff, por el Centro Unión Israelita; el imán Jihad Sleiman, por la Sociedad Árabe Musulmana; el pater Gabriel Díaz, por la Iglesia Ortodoxa Griega del Patriarcado Ecuménico; el padre Nahabed Garabedian, por Iglesia Apostólica Armenia; el pastor Pablo Oviedo, por la Iglesia Metodista; el pastor Jorge Piñero, por la Iglesia Anglicana; Juan Pablo Nieto, por la Comunidad Bahá'í; Oscar Cervantes, por el Centro Ecuménico Cristiano; y el presbítero Federico Palacios, por la Comisión Arquidiocesana de Ecumenismo y Diálogo Interreligioso

En representación del gobernador de la provincia de Córdoba estuvo Claudia Martínez; en representación del intendente de la ciudad de Córdoba, María del Rosario Acevedo, y el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba, Domingo Sensín, entre otras autoridades civiles.

Tras la invocación inicial en la que juntos pidieron al Señor que “nos guíe, para que nos encontremos como pueblo y juntos trabajemos por la paz y la concordia”, dieron gracias a Dios y leyeron uno a uno los compromisos que asumen. También hubo cánticos, mensajes de esperanza y una plegaria de fraternidad y ciudadanía.

Entre otros puntos, se comprometieron a “animar a quienes ejercen roles de dirigencia en nuestra sociedad, a descubrir que el poder es servicio, que los intereses particulares nunca deben opacar la búsqueda del bien de todos; y sostener procesos de formación ciudadana que susciten nuevos dirigentes con capacidad de liderazgo en una participación real e inclusiva en las instituciones democráticas”.

Texto del compromiso interreligioso
Te agradecemos Señor, que en Tu infinita bondad has dado al pueblo argentino una belleza particular en la historia, acogiendo en su seno una gran diversidad de razas.

Por ello nos comprometemos a sostener y profundizar en una cultura del diálogo y respeto, reconociendo la dignidad fundamental de toda persona.

Te agradecemos a Ti, Dios de la Alianza, que en Tu gran misericordia haz llamado al ser humano por caminos diversos para que Te reconozcan como Señor, y en éstas tierras argentinas nos has enriquecido con diversidad de credos.

Por ello nos comprometemos como personas y comunidades de fe, con nuestras pequeñeces y limitaciones a cultivar y cuidar el vínculo de la Paz, que emana de Ti, valorando la diversidad de Tu infinita Gracia.

Te agradecemos Señor, por la majestuosidad de la Creación, con su belleza admirable y su riqueza incalculable, don de Tu generosidad confiando el cuidado de ella y así habitemos en paz y en la gratuidad de Tu amor por siempre.

Por ello nos comprometemos a madurar una conciencia responsable que valore y cuide los dones de la naturaleza en su asombrosa diversidad, alentando políticas y modelos que permitan un uso racional de los recursos mas allá de los intereses económicos.

Te agradecemos Dios de la historia, porque inspiras en el corazón de la humanidad el anhelo de justicia y paz; y nos has permitido como pueblo argentino construirla en espíritu e instituciones democráticas.

Por ello nos comprometemos a renovar nuestro rol ciudadano en la construcción del bien común, defendiendo los derechos de cada persona y exigiendo el cumplimiento de las obligaciones como argentinos, respetando la validez y responsabilidad de las instituciones democráticas, atendiendo especialmente a los sectores más vulnerables de la sociedad.

Te agradecemos Dios y reconocemos Tu gran sabiduría, porque has suscitado en el tiempo hombres y mujeres con capacidad de gobernar y dirigir los destinos de los pueblos, las instituciones y diferentes comunidades presentes en nuestra Patria.

Por ello nos comprometemos a animar a quienes ejercen roles de dirigencia en nuestra sociedad, a descubrir que el poder es servicio, que los intereses particulares nunca deben opacar la búsqueda del bien de todos; y sostener procesos de formación ciudadana que susciten nuevos dirigentes con capacidad de liderazgo en una participación real e inclusiva en las instituciones democráticas.

Te agradecemos Señor que hayas dado al ser humano la capacidad de realizarse con el trabajo de cada día, contribuyendo al progreso de los pueblos, al sustento de la propia vida y de la familia.

Por ello nos comprometemos a fomentar una cultura del trabajo en nuestra sociedad, un ordenamiento adecuado de la economía y legislación laboral, junto a políticas inclusivas que permitan que todos los sectores tengan posibilidades reales de participar en éste don, en un orden justo y sustentable.

Te agradecemos Señor que nos hayas dado la familia como ámbito fundante de las sanas relaciones interpersonales, donde aprendemos a amar y ser amados, ser educados en los valores esenciales y así madurar como personas.

Por ello nos comprometemos a cuidar y fomentar el valor de la familia en nuestra sociedad, generando espacios de acompañamiento y fortalecimiento de los vínculos, animando las iniciativas presentes en la sociedad, promoviendo una legislación que la defienda, y alentando a buscar nuevas estrategias en orden de promover la belleza de la vida que se suscita en ella.

Te agradecemos Dios omnipotente que has hecho partícipe al ser humano del don del conocimiento y de la ciencia, suscitando en la historia, diversos modos y espacios que contribuyeran a desarrollar éste don para el servicio de la humanidad, con la formación y educación de distintas generaciones.

Por ello nos comprometemos a valorar los aportes de la ciencia en orden a un mayor cuidado de la dignidad de las personas y defensa de la vida; a sostener el rol de los educadores y de las instituciones para que así promuevan una mayor humanización y construcción social; a estimular alianzas en la sociedad que fortalezcan una educación en valores ciudadanos.

Te agradecemos Señor de la misericordia por los maravillosos signos de fraternidad manifestados en muchas personas, hermanos y hermanas que con su ejemplo de vida y fe iluminan y sostienen nuestra sociedad.

Por ello nos comprometemos, inspirados por la esperanza que nos entrega el sentido de trascendencia,  a fomentar y generar espacios  donde el Reino de Dios se haga visible,  donde la generosidad, la gratuidad del amor se haga cada vez más presente y  donde la fe en Dios y el amor por los hermanos se transforme en una verdadera forma de vida…

La oración interreligiosa en Facebook Arquidiócesis de Córdoba.