“Que nadie me quite mis derechos hasta el último suspiro de mi vida”, así contó Pablo Musse que Solange le había escrito antes de fallecer de un cáncer terminal el pasado viernes por la madrugada en Córdoba Capital, lo hizo en nuestro programa Gente Activa por radio Resistencia FM 90.3 y radio 6 de Enero.

 

Musse comenzó diciendo: “Si, tengo la firmeza que Ella ya está descansando mejor que acá en la tierra, la verdad, me obligaron a volverme más de mil kilómetros para atrás cuando solo faltaban trecientos kilómetros para despedirla a mi hija Solange, éstas personas no tuvieron un poquito de sentido común valiéndose por los protocolos implementados”.

Más adelante dijo: “En la carta que me escribió mi hija Solange me decía ´que nadie me quite mis derechos hasta el último suspiro de mi vida´, además Ella me dijo que ´si no servía para nosotros sirviese para el resto de la gente que vive con una enfermedad terminal´, la verdad que estoy muy agradecido a los medios de comunicación por la trascendencia y difusión que la están dando, aquí en La Rioja, en CABA también ahora están permitiendo de encontrase los familiares con éstas enfermedades, gracias a Dios el mensaje de Solange se está escuchando y están reviendo los protocolos desde el gobierno Nacional. También otro mensaje de mi hija me decía ´que a partir de mí no haya más otra Solange´”.

Sobre el final remarcó: “Estos tratos inhumanos se tornaron tan perversos. Mi hija falleció el viernes a la madrugada, yo llegué el sábado a la mañana a Córdoba y a la tarde nos despedimos de sus restos, ahora nosotros haremos lo que Ella nos pidió, ahora el resto de su cuerpo cremado diseminaremos en el mar frente a San Antonio Oeste, ahora mi familia quedó conformada por mi Señora, mi hijo, mi cuñada y yo. Mi hija con éste cáncer terminal la peleó más de diez años, la verdad que no creo que exista más protocolo que darle amor a estas personas que sufren de éste tipo de enfermedad, las personas son sentidos común nos cuidamos siempre y no necesitamos protocolos para darle amor a nuestros seres queridos. Seguramente hubo muchos casos similares a lo de Solange, Dios quiera no haya más ningún otro a partir de ahora”, concluyo Pablo Musse desde Plottier Neuquén.